Para Mi Claudia

Aún no puedo reaccionar ni con una leve sonrisa, sabiendo cuan rechazado es el verdadero amor. Y que todos somos unos tontos egoístas, que confundimos al amor con cualquier estúpida cosa pasajera, y lo digo entre lágrimas, porque somos muchas las personas que creemos saber amar sinceramente, y me incluyo en ese grupo, no anotando mi nombre como en una lista mediocre e infantil, si no lo mucho que he dado, que he intentado dar y lo que no se me ha dejado. Es difícil aceptar que el amor verdadero ha sido más veces objetado, que el amor tan solo en palabras efímeras como los segundos.

No sé porque me duele, a pesar de que es ajeno a mi, a pesar de que ahora pongo muy aparte lo que pienso que estoy haciendo. Porque todos nos merecemos el verdadero amor, y porque pocos son los que lo pueden tener, nunca a su lado si no muy cerca.
Desde hoy me sumo a la lista de injustos que aborrecen las injusticias, me siento como Gulliver al llegar al mundo real, y verse cada día en el espejo. Sé que desde hoy y así todos los días, no podré decir “soy perfecto”.

A estas alturas podría decir que el desamor es mucho más grande que el amor. No porque sea mucho más bueno y más hermoso, si no que cada vez va alcanzando dimensiones que nos encargamos de aumentar, y que se vuelven inalcanzables, como un ecosistema perfecto, después de que ya estemos sufriendo los efectos del calentamiento global.

Ahora estoy en shock, no por no saber como es el amor, si no por estar conociéndolo sin poder vivirlo. El tiempo va pasando, y lamento ser tan iluso, creer que con el amor todo es posible. Solo se necesita de uno para amar. El verdadero problema está en que se necesita de dos para ser felices.

Esperar algo de una persona que no te ama. Es simplemente sufrir. La esperanza, la esperanza no es algo que puedas más que germinar en otra persona, de ahí en adelante crece sola, o simplemente muere. La esperanza tuya, esa es muy fuerte para muchas cosas, pero no para lograr que alguien te ame…

Estar enamorado realmente es usar unos anteojos que no te dejan ver José Luis, lo son, y hoy más que nunca me he dado cuenta, porque he visto que tengo unos. Y aunque lo sé, sé que será inútil tratar de sacármelo a la fuerza. Solo espero, que cuando estos anteojos dejen de estar ante mí. Yo, yo no quede en el vacio total. Que yo, pudiendo o no pudiendo ver la realidad, haya avanzado, todo, cuanto siempre he querido… Ahora permíteme escribirle una carta a mi Claudia.


Querida Claudia:

A veces pienso que tengo la vida limitada. Y eso me causa mucho dolor ¿Sabes? No por que tal vez viva solo poco o mucho menos de lo que querido y quiero vivir. Tendré poco tiempo para amarte. Tal vez pienses que no deba hacerlo, porque tu ni en sueños lo haces ni lo piensas hacer.
Hasta ahora no entiendo como sucedió, aunque si recuerdo las cosas que han pasado, y estoy viviendo cosas, que cada vez me alejan más de ti.

Hoy me he dado cuenta que desde que te conocí, nunca cambiaste, solo que yo te vi de una forma diferente Claudia, y aunque ahora sienta dolor, sé que mi forma de mirarte en el futuro cambiará, por más que eso me lleve al resignarme absolutamente y decir que parte de vivir para amar, parte de eso consiste en olvidarte. A veces es muy inútil para mi, esa forma de pensar, pues todos me dirán, de que me sirve amar, si lo que quiero hacer es olvidar, pero no Claudia, esa no es la razón más fuerte, la razón más grandiosa es que quiero que tu y yo seamos felices, y como he descubierto que no podrá ser juntos, entonces quiero que cada uno por su lado lo sea.

Tal vez el día en que te deje de amar de la forma como lo hago ahora, ese día me importará menos tu felicidad, solo como la de cualquier amigo, o conocido, a quien solo puedo desearle muchos éxitos.

Soy un soñador, que conoce la existencia de la realidad, y la acepta, por eso a veces anhelo estar contigo y aunque sea ser solo tu amigo, pero esa esencia de la realidad que tengo en mi vida, me obliga a dejar de hacerlo, me obliga a pensar en lo imposible que es , por lo diferente que somos, por todo lo que eres, y por todo lo que no soy, lo otro no lo diré, no diré tus carencias, pues no me enamoré de ellas, pero si sé que mis debilidades, son los que me alejan de ti, o simplemente yo, con todo lo que soy.

Desde que cambiaste, a mi parecer. A pesar de que antes ya habías dicho que eras diferente solo conmigo, todo ha sido muy difícil de comprender Claudia, y aunque en muchas ocasiones he querido preguntarte un porqué, con lo que te conozco, sé que te irás por la cotangente del asunto, o simplemente te harás la indiferente, o dirás No he cambiado, eso ultimo solo lo supongo.

Claudia, ahora que he escrito muchas cosas que siento, no sé que sucederá, pienso que talvez solo dirás gracias, como siempre lo has hecho, y siempre lo he odiado, o si solo te expresarás con ese “:O” que sueles poner. Lo muy cierto y que quiero replicarte en esta carta, es que estoy muy agradecido, ahora comprendo que tal vez no a ti, o tal vez si, por existir. A esos amigos que hicieron que te conociera. Aún cuando en muchas ocasiones en las que he sentido dolor, por tu causa, he maldecido esos segundos, minutos, circunstancias, medios, y hasta personas que hicieron posible, que llegaras a mi vida, pero sé que eso estaba ya destinado a ser, y no hay culpa ni en mi ni en ti talvez.

Pero, ¿sabes porque me siento agradecido? Por que también he podido amarte en pensamientos, en textos. poemas, sueños. He podido mejorar muchas cosas, y tener el sentido de superación en muchas cosas, He empezado dos carreras, como he dicho, tal vez más que dos, porque una sola, no. Eres ese trofeo que cada vez me convenzo que no llegaré a tener, pero por el que lucho, por el que he querido levantarme y seguir. No lloraré cuando llegue a la meta, y no te tenga ahí, no, no lo haré. Sé que este amor habrá valido la pena, no por las sonrisas después de las lágrimas, y del dolor. Habré aprendido mucho, y eso se suma a mis logros.

Que estés muy bien después de todo lo que te he visto hacer, si malo o bueno, no lo sé. No conozco tanto a ya sabes quien, pero tal vez sea el gran tipo que te empeñas en decirle a todo el mundo. Yo creo que sabes quien debes ser, en el fondo, y en lo que yo he podido percibir. Estoy seguro de muchas cosas que no diré, porque al lanzarlo solo serán suposiciones, y me he cansado de ellas.

Te amo, y esos son mis anteojos, esos son mis días, mis poesías, mis acciones, mis carreras y tú, tan intangible como siempre, tan tangible como nunca…

Nior

Cuídate Claudia,
Cuando estés conmigo
Porque a amar
Estoy aprendiendo
Porque esta carrera
Solo esta comenzando.

Por que mi corazón
Cuando está contigo
Aún solo en un instante
Aún lejos, pero cerca
Ya no necesita abrigo

Cuídate Claudia,
Porque no estoy sentado,
Por que he decidido no morir,
Y un leve descuido tuyo
Esta carrera habrá acabado.

Cuídate Claudia,
Incluso cuando esté sin ti,
porque el mundo es grande,
pero el amor mucho más.

(Una adaptación de un poema de Ernesto Cardenal, hecho para mi Claudia)
Junior Jara P.